Hace un par de días me pase por la tienda de animales a hacerme con un rascador para mis gatos. Ya que algunos muebles han sufrido los arañazos de sus uñas. Había detenido a los pequeños monstruitos colocando cinta adhesiva al revés. De manera que el lado que engancha quedara hacia fuera. Esto detuvo a Tomas y Lola de seguir arañando el mueble. Problema, el adhesivo en algún momento dejara de ser adhesivo, ya sea por los pelos que se quedaban enganchados o por el mismo polvo de días.
En la tienda me encontré varios rascadores, ningún inferior a 20€. El sistema era bien sencillo, una alfombra de esparto, un palo forrado de esparto, etc. No estaba dispuesto a pagar por una cosa tan sencilla así que se me ocurrió hacer una visita a un todo a cien con propietarios de origen asiático. Todos sabemos que allí hay cosas muy baratas. Y cierto, un rollo de cuerda me costo 0,75€, con lo que despilfarre un poco y me compre dos rollos.
Solo faltaba forrar de cuerda alguna cosa, me acorde que tenia que tirar un par de sillas viejas, así que me quede con una de las maderas de una de las sillas para mi invento casero. La madera que escogí tenía dos agujeros de en cada extremo, de manera que podía pasar la cuerda por ellos, hacer un nudo y proceder a forrar de cuerda la madera.
Como tenía cuerda de sobra le di dos vueltas a la cuerda y deje una cuerda para atarlo como veréis en las fotos. Ahora solo hace falta que los gatos le han caso :P. Pero he conseguido ahorrarme nada menos que 19,25€. :)
Imagino que no todo el mundo tendrá sillas viejas de donde pueda sacar la madera, pero en principio había pensado utilizar el rollo de cartón del papel de aluminio y algo de pegamento.